

¿Qué cubre un seguro de viaje?
Para conocer mejor la importancia que tiene un seguro de viaje, es necesario saber las coberturas y ventajas que tenemos del mismo. En primer lugar, como cualquier otro tipo de seguro, un seguro de viaje cuenta con una serie de coberturas básicas que se pueden ampliar, dependiendo de lo que necesitamos, amoldándolo por lo tanto a cualquier tipo de viaje. Las coberturas básicas del mismo, habitualmente suelen contener la atención médica en el caso de enfermedad o de que hayamos sufrido un accidente, la cancelación de viaje, seguro de equipaje, de responsabilidad civil… en resumidas cuentas, se trata de una serie de coberturas que lo que nos vienen a garantizar es el buen estado de aquellos que lo han solicitado. Si por ejemplo vamos a la playa y nos pica una medusa, que es muy habitual durante estos últimos años, tendremos un seguro que nos ayudará o si por ejemplo hemos tenido un percance en el extranjero, nos ayudará a cubrir todos los gastos médicos derivados de la atención médica necesaria. Recuerda que la atención médica en el extranjero no es como en España. Así mismo, si sufrimos una torcedura o cualquier otro problema que nos obligue a cancelar el viaje, con el seguro de viaje podremos recuperar el importe del billete, en definitiva, al seguro de viaje lo único que le importa, es que podamos disfrutar nuestras vacaciones con tranquilidad.


¿Qué coberturas deberíamos elegir?
Las coberturas del seguro se tienen que amoldar a lo que vamos a realizar durante las vacaciones. El destino también es importante, ya que algunos países nos piden disponer de un seguro obligatorio para viajar, como pueden ser Cuba o Rusia entre otros. Por lo que respecta a las coberturas, si vamos a practicar deportes de riesgo, es recomendable elegir una cobertura que pueda cubrir cualquier tipo de accidente por causa de la actividad. Estas coberturas también pueden llegar a ser especiales y se pueden ampliar, dependiendo del país que visitemos en donde sea más habitual tener un determinado tipo de problema. En definitiva, contratar un seguro de viaje es la forma más sencilla de poder desconectar durante las vacaciones y que los imprevistos que surjan, no nos produzcan un problema económico. Los accidentes en los viajes ocurren y si no estamos protegidos contra estos, las pérdidas monetarias pueden ser bastante importantes, convirtiendo lo que iban a ser unas plácidas vacaciones, en un auténtico infierno